Del arranque de la campaña electoral

Esta noche arranca una nueva campaña electoral, la que desembocará en las votaciones del 20 N para elegir al nuevo gobierno de España. Con la crisis arreciando y las encuestas claramente a favor del Partido Popular, lo que parece despacharse en estas votaciones es si finalmente el PP consigue o no la mayoría absoluta y si el PSOE encaja una amarga derrota o una derrota dulce. Para el BNG, aplazado su debate interno, el objetivo es mantener su actual presencia en las Cortes y captar en la medida de lo posible a los progresistas descontentos con la gestión socialista. Éste es el mapa previsible, aunque por delante quedan aún dos semanas de campaña que irán afinando estas posiciones e irán decantando hacia uno u otro lado el resultado final de la contienda electoral. El 20 N tiene su importancia porque unas generales ya la tienen de por si, pero quizá más en esta ocasión por la precaria situación que vivimos. Si el 20 N es importante, más lo es el 21, el 22 y siguientes. La tarea que queda por delante es inmensa. Cunde la sensación de que tras la crisis las cosas ya no serán iguales. Falta por saber hasta qué punto seremos capaces de conservar un estado de bienestar en el que tanto empeño habíamos puesto.