19 de abril de 2012

De Negreira, Losada y los modos en política

El alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, y su antecesor en el cargo, Javier Losada, nos han ofrecido hoy un intercambio de declaraciones muy poco habituales entre políticos de distinto signo. El primero ha reconocido el valor de uno de los proyectos impulsado por el segundo. Y el segundo ha evitado censurar la acción de gobierno del primero, de su sucesor al frente de la Alcaldía coruñesa. Es un gesto de respeto institucional que debería enmarcarse en la normalidad, pero que debe ser destacado por su carácter inusual. Hoy, en la política, los rivales no conceden ni el beneficio de la duda, no reconocen los logros del oponente y acuden con demasiada frecuencia al discurso grueso y simplista para descalificar al que tienen enfrente. Frente a esta posición, hoy Javier Losada ha subrayado que quien ha sido alcalde debe hacer un esfuerzo por mantener una buena relación institucional con su sucesor. Es una posición política, pero también ética; un mensaje para explicar la situación, pero que bien podía ir dirigido a su antecesor. 

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