9 de noviembre de 2011

De la situación económica de Expo Coruña

Durante muchos años la construcción de un recinto ferial se presentó como un objetivo irrenunciable para A Coruña. Muchas voces reclamaban unas instalaciones que servirían para dinamizar la economía de la ciudad y para optar a eventos que se escapaban de sus posibilidades por la falta de recinto. Hoy, ExpoCoruña da pérdidas y sus responsables buscan fórmulas que sirvan de revulsivo. Es cierto que el análisis se queda cojo si no va acompañado de un estudio sobre el impacto económico del recinto ferial en otros sectores, pero que la propia instalación dé pérdidas es un problema al que habrá que buscar solución. Algunas de las iniciativas puestas en marcha nos sorprendieron por su exclusividad, por ir destinadas a un público demasiado reducido, otras tienen arraigo popular, como la feria de autónomos; las ha habido polémicas, como el salón erótico, y de fuerte impacto mediático, como el Sónar. ExpoCoruña se ofrece como espacio polivalente, pero posiblemente compita con otros recintos ya asentados en la ciudad. Su experiencia, al margen de la búsqueda de la rentabilidad, también sugiere una reflexión sobre la obsesión por el continente y la poca atención al contenido. A Coruña está servida de espacios y recintos multiusos a los que también afecta la caída de la actividad. Urge centrar ya los esfuerzos en la generación y captación de eventos porque, si en algún momento pensamos lo contrario, estas instalaciones no son un fin en si mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir