Joaquín Sabina: Aves de paso

Cuando a Joaquín Sabina le preguntaron por esta canción, Aves de paso, tuvo que aclarar que no se trataba de las mujeres con las que se había acostado, sino todo lo contrario: eran las mujeres con las que quiso, sin éxito, pasar una noche de locura y pasión.
La propia letra y las constantes alusiones a otros temas hacen pensar que el cantautor mezcló realidad y deseo, que no dijo toda la verdad, quizá llevado por una falsa modestia. Sea como sea -este extremo en el fondo es lo de menos-, el tema reivindica con dignidad a las denostadas parejas de un día, esas damas de noche que en el asiento de atrás de un coche no preguntaban si las querías. Al margen de que es una de mis canciones preferidas de Sabina, me sumo a la reivindicación de esos 'pañuelos cura-fracasos'. Porque, independientemente de que esos encuentros terminen o no en la cama, lo importante es ese beso robado, ese sudor compartido tres pisos en ascensor.