¿Terrorismo incendiario?

En la luna trasera de mi coche luce una pegatina de Nunca Máis, pero ayer no fui, conscientemente, a la manifestación en Santiago.
El movimiento, surgido en el desastre del Prestige y con un lema recogido del siniestro del Mar Egeo, tuvo en su momento mis más sinceras y hasta apasionadas simpatías. Pero, en esta ocasión, se ha equivocado en su nueva batalla contra el “terrorismo incendiario”. Dice wikipedia que terrorismo es la sucesión de actos de violencia que se caracteriza por inducir terror en la población civil como forma de lucha política. Dice la Real Academia Española que terrorismo es la actuación criminal de bandas organizadas que, reiteradamente y por lo común de modo indiscriminado, pretende crear alarma social con fines políticos. Hasta el momento no hay ni una sola prueba, ni un solo detenido, que permita hablar de la existencia de terrorismo incendiario. Ayer hasta el conselleiro de Medio Ambiente, Pachi Vázquez, descartaba en la SER la existencia de una trama organizada detrás de los incendios forestales. Entonces, ¿contra quién se manifestaba Nunca Máis? ¿Qué hacía el también conselleiro socialista Ricardo Varela en la movilización? Da la sensación de que la plataforma ha salido a escena por los reproches que recibió en los primeros días de la marea de fuegos. “¿Dónde están ahora los de Nunca Máis?”, se preguntaban algunos. La plataforma le ha dado la coartada a la Xunta bipartita: si hay “terrorismo incendiario” hubo una operación perfectamente planificada y organizada y, por tanto, los Gobiernos gallego y central no pudieron hacer más que lo que hicieron.