Del cese de Xosé Lois Martínez

El rector de la Universidade da Coruña, José María Barja, ha cesado hoy al vicerrector de Infraestructuras. Lo ha hecho después de que Xosé Lois Martínez admitiese que impulsó la construcción de un edificio en el campus de Elviña a sabiendas de que carecía de la licencia necesaria para iniciar los trabajos. Barja no tenía otra salida que decidir el cese fulminante de quien ha formado parte de su equipo. La actuación es grave en si misma porque supone un claro incumplimiento de la normativa vigente. Es más grave aún porque la iniciativa parte de un cargo de la Universidad que gestiona dinero público. Y tiene el añadido de la ostentación porque Xosé Lois Martínez actuó a sabiendas de que su decisión era irregular, lo admitió públicamente, lo defendió y, tras el cese, lo sigue justificando, con un claro desprecio por la legalidad. El hasta ahora vicerrector se queja de los obstáculos de otras administraciones al crecimiento de la Universidad. Y puede que ahí tenga razón. Pero su actuación es injustificable y define al personaje. La Universidad tiene que dar ejemplo y aquí sólo lo ha dado cuando el rector ha firmado el cese.